por Natalia Ruiz de Olalla / 4 minutos y medio de lectura
Si nunca has solicitado una comunicación con tu animal, a lo mejor te estás preguntando qué puede contar un animal aparte de quiero comer, dormir, hacer pis y pasear.
A lo largo de todos estos años, después de cientos de comunicaciones, te diré que he vivido historias increíbles.
Me ha costado elegir una para que puedas comprender la profundidad y belleza de los seres que nos acompañan en nuestro camino de vida.
Aquí va una de esas maravillosas historias que he tenido el privilegio de vivir.
Monty, el perro de la Felicidad
En julio del 2016, una pareja me solicitó una consulta para saber qué hacer con un perro que, cada dos por tres, aparecía en el jardín de su casa y que, por más que lo devolvían a sus dueños, volvía a aparecer.
Ellos ya tenían una perra, Neska, y no querían más. Como ya me habían solicitado antes comunicaciones con ella, pensaron que, quizás, una comunicación con el perro podría ayudarles a todos.
Así que, comuniqué con él para saber qué tal estaba y por qué insistía en ir a esa casa.
Esto es lo que transmitió:
“Lo importante para mí es ser y ofrecer Felicidad. Mis antiguos dueños humanos no sabían lo que era. No eran felices, por eso, no me querían. Yo solo quería ser feliz y hacerles felices, pero, ellos no querían. No estaban hechos para soportar la Felicidad.
En parte, llegué a sus vidas para darles esa oportunidad de abrirse al Amor y a La Felicidad, pero o no han sabido o no la han podido aprovechar. De manera que, ellos seguirán su camino y yo el mío. El mío está en la Felicidad, en manifestarla en todas sus expresiones. Ésta es mi misión de vida: hacer y ser feliz”.
“Con los otros humanos que tuve por dueños, no lo he pasado muy bien. Han sido varios y ninguno ha sabido ni tratarme bien ni quererme. Por eso, yo mismo me he buscado una casa nueva con otros humanos que sí saben ser felices y que sí han nacido para La Felicidad.
Así que, quiero darles las gracias a los dos y decirles que estoy muy contento y agradecido de esta oportunidad que me están dando para poder vivir alegre y feliz en armonía con ellos, en su familia y con la perra Neska”.
Y Neska, ¿qué opina?
Ante esta revelación, se quedaron tan sorprendidos que no sabían muy bien cómo actuar. Aunque algo intuían, no se esperaban tanta determinación ni consciencia.
De manera que, también solicitaron una comunicación con Neska, su perra, para saber qué opinaba de toda esta situación.
Esto es lo que contó:
“Monty sería muy feliz con nosotros porque, como dice, ha nacido para la Felicidad, para darla y atraerla.
A mí, sí me gustaría que se quedara, aunque voy a tener que entrenarlo un poco para que no me invada demasiado”.
“Estad tranquilos. Me siento bien con él. Me gusta enseñarle cosas, pasear juntos... Es agradable tener otro amigo perro en la casa. Estoy bien y estamos los dos a gusto”.
“Monty era el que faltaba para darnos más alegría y dinamismo a nuestras vidas. Es un ser noble y hermoso con grandes deseos de aprender y de avanzar. Se adaptará definitivamente a nuestros ritmos y a nuestras costumbres”.
"Entonces, ¿qué hacemos?"
Ante la clara y contundente opinión de Neska, y la determinación de Monty, no les quedó más remedio que... adoptarlo... ¿o les adoptó él a ellos?
Seis años después…
¿Te gustaría saber qué ha sido de Monty y su familia seis años después?
Te lo cuenta su humana:
“Así es, Monty llegó a nuestra Familia para hacernos felices, pero no solo a nosotros, cada vez que nos cruzamos con alguien, tiene que ir a saludarle moviendo su colita y con esa cara que parece decir “¡Hola, amigo! ¿Qué tal estás? ¿Quieres ser mi amigo?”. Y de forma casi instantánea, le acarician y escuchas que le dicen: “¡Aaay!, ¡qué perro más cariñoso!, ¡qué bonito!”. Incluso algun@ que te dice extrañad@: “… y el caso es que no me hacen mucha gracia los perros”.
Parece que no se le resiste nadie, especialmente los niños sienten pasión por él, quizás porque ellos no se resisten a ser felices, y esa es la misión de Monty.
Así que, creamos una preciosa Familia junto a Neska y él. Es un perro muy feliz, haciendo felices a los demás, así lo eligió él y así ha sido. Gracias”.
La trascendencia de una comunicación animal
¿Cómo te quedas? ¿Te imaginabas que un perro pudiera tener tan clara su misión de vida y que, además, supiera detectar dónde ir para desarrollarla de la manera más favorable para él y su entorno, e insistir una y otra vez hasta conseguirlo?
Cuando comunico con un animal, nunca sé lo que puede llegar a contar. Es como cuando te pones a charlar con una persona, no tienes ni idea sobre qué puedes terminar hablando. ¿Te has preguntado alguna vez qué podrá tener tu animal para contarte? ¿Qué tendrá reservado para ti?
¿Ya sabes cuál es su misión y el propósito de vida de tu compañero animal? Si te gustaría saberlo o profundizar más, una
consulta de comunicación podría ayudarte.